Navidad a la belga

Si, ya viene Navidad (shingl-bel, shingl-bel……..) Acá en Bélgica, también. Las calles están decoradas, se ve que la gente va cargada con más bolsitas de regalos, ya abrieron las pistas de patinaje sobre hielo de la Grand Place de Bruselas y del hotel Conrad, abrió el ‘Marché de Noël’, etc.

Lo que no se ve por ninguna, pero ninguna parte son pesebres. Niño Jesús ? Qué Niño Jesús ? Mucho Père Noël, mucho Sinterklas, mucha venta de pinitos naturales, pero mención del motivo obvio por el cual se festeja Navidad, nada, nil, nulo, no computa. Estoy segura que si paro a nenes por la calle y les pregunto por qué se festeja Navidad, me van a decir « porque viene Papá Noél. » Llamativo porque este es un país donde la religión oficial es la católica. Interesante……

Otro tema que me llama la atención es el timing y desarrollo de los festejos navideños. En Argentina, estamos acostumbrados a juntarse con familia y/o amigos el 24 a la noche para una cena importante y prolongada, y los regalos sólo pueden abrirse a la medianoche, momento también del consabido ‘brindis’ con champagne, sidra o, Dios nos libre, ‘Fresita’ o demás concocciones etílicas.

Acá en Bélgica, en gral la cena del 24 comienza alrededor de las 6 de la tarde (depende de lo cosmopolita del hogar. En Bruselas, quizás comienza más tarde, en los puebluchitos donte tanto les gusta habitar a los belgas, seguramente empiezan antes) Cuestión que empiezan con aperitivos, quizás foie gras con tostaditas, etc. De plato principal se come mucho pato, conejo y demás carnes « de caza » y quizás algún postre tipo torta bomba comprada en la patisserie.

Los regalos son todo un tema aparte. Por empezar, se abren cuando a uno le da la gana. A mí me ha tocado abrir regalos a los 10 minutos de haber llegado al lugar de la cena. Por un lado, está OK, pero le saca ese elemento de excitación que te da tener que esperar hasta las 12 para empezar a arrancar papel de regalo. El problema calculo que es que acá nadie aguanta despierto hasta la medianoche. En general, la cena termina a las 23hs y no hay brindis ni garrapiñada de almendras, ni turrón ni nada. Tasa-tasa, cada uno se vuelve a su casa. Nada más deprimente que estar en el auto volviendo a casa cuando dan las 12. Corta mambo total.

Luego está el espinoso tema de los regalos en sí. Qué regalar. Hay un tema que a los belgas les repugna más que nada en la vida y es LA INCERTIDUMBRE. Si algo no está definido desde el vamos, GRAN TERROR !! Por eso, a la gente le gusta saber qué tiene que regalar. Para aniquilar la incertidumbre de los regalos hay varias opciones. En algunas familias, la gente intercambia listitas con algo así como el « top ten » de cosas que le gustaría recibir. Luego, los demás integrantes elijen algo de la listita y eso compran. También hay otra modalidad, que es en cada flia se hace un sorteo para ver a que otro integrante tienen que comprarle algo. Finalmente, otra modalidad y para mí la más ridícula, es la que en cada familia se fija un monto para los regalos. Por ejemplo, nadie puede hacer un regalo más caro de 20 euros.

De estas tres opciones, la de la listita de los « top ten » es por ahí la que más me cabe porque al menos deja un resquicio para una mini-sorpresa. Igual, me parece en general de mal gusto eso de decretar el tema de los regalos. Y si se me da la gana de gastarme una fortuna en un regalo y unos pocos euros en otro ? Y si me toca en sorteo regalarle algo a una prima tercera que nunca veo y no tengo ni puta gana de regalarle nada ? Cualquiera…..

Mi plan para estas Navidades es « argentinizarlas » un cacho. Compraré panetonne, turrones y tortas de almendras (beneficios de vivir en la « capital de Europa »), obligaré a todos a quedarse despiertos hasta la medianoche, así tenga que ponerles escarvadientes bajo los párpados, y regalaré lo que se me canten la tarlipes.

He dicho. Feliz Navidad, ho, ho, ho !!!!!!